La aceptación es un punto importante en la relación terapéutica, el brindar calidez y seguridad es fundamental y es solo cuando se llega a comprender los sentimientos y pensamientos que el cliente muestra sean éstos horribles o extraños, tal y como el otro los ve, que es cuando mayor probabilidad hay que el cliente se abra y explore en él mismo, por eso la libertad es una condición importante en la relación.
Además la aceptación no sólo debe verse como el de un individuo diferente y valioso sino que hay que incluir la empatía, para observar su mundo tal como él lo ve mostrando que el mapa no es el territorio y que tu visión no es la única existente.
En todas las condiciones antes comentadas, confianza, empatía, reconocimiento de lo propio y lo del otro es cuando existe la motivación por y para el cambio: el individuo descubriría en sí mismo la capacidad de utilizar esta relación para su propio desarrollo, reorganizando su personalidad, a todos los niveles comenzando a aparecerse a la persona que quiere ser y valorándose más.